El festival Santiago Groove es un encuentro de bateristas de alto nivel nacional e internacional que cada año nos deleita con diferentes exponentes, cabe mencionar que sus versiones de años anteriores, 2019, 2020 y 2021 no pudieron ser realizadas por temas de contingencia nacional, primero por el estallido social y luego por la pandemia, sin embargo si pudo realizarse su décima primera versión, que fue realizada con máxima capacidad en sala SCD Bellavista, y ahora les traemos el comentario de la jornada.
Todo comenzó pasadas las 19.00 hrs con Franco Mitchell, conocido por ser el baterista de Éntomos, quien nos mostró todas sus destrezas en batería con material de sus proyectos musicales Privatopia, Violent Passion Surrogate, lo último de Maldito y, por supuesto, de Éntomos. Franco muestra el poderío y peso de sus golpes a la hora de interpretar ritmos algo más pesados como lo son los del metal usando una atípica construcción de batería con Toms 12″ 16″ y 14″ pasando de tonos altos, bajos y altos nuevamente adquiriendo un estilo diferente a lo convencional, también explicó como abordaba las composiciones en las baterías de sus distintos trabajos musicales, siempre con una directa coordinación y complementación con las líneas de guitarras.
Como punto a parte, el punto más alto de la jornada fue cuando interpretó la canción «Leviatán» – estrenado a fines de Julio pasado y del que les contamos en esta nota – primer single del álbum, «Praxis«, en donde los asistentes corearon sus letras.
El segundo en escena y además organizador/Fundador del evento fue Felipe Van Den Mer, quien cuenta con el disco sólista, “La Energía de la Matriz» lanzado el 2015, lleva acabo este proyecto desde el año 2009. Felipe tiene una larga trayectoria como músico, que incluso lo ha llevado a presentarse fuera de nuestro país en festivales como Izcalli Drum Fest 2010 en México y el FIBPC (Festival de Bateristas y Percusionistas en Córdoba, Argentina) los años 2010 y 2012.
Felipe partió su presentación con un solo de batería impresionante lleno de tecnicismo y energía pero llamó rotundamente la atención su ejecución con las baquetas dos en cada mano y además una polirritmia que ocupaba cada una de sus extremidades, utilizando diferentes tiempos de 4, 5, 6 y 7 en un mismo groove. Felipe también toco las canciones «Peso» y «Se Refirió a Nosotros Como Sitar» de su DVD «Hybrid Drumming Discípulo y Maestro» lanzado el año 2021, en donde mezcla diferentes ritmos.
Finalizando la jornada se presentó desde Coquimbo Rodrigo Iter de quien quedamos gratamente sorprendidos con su talento innato como percusionista y su gran capacidad de disociación de sus extremidades.
Rodrigo presentó un latín jazz con sonidos sudamericanos. Además de tocar, él nos fue interiorizando del cómo adquirió su técnica totalmente autodidacta basada en referentes de la batería mundial pero bajo su propia mirada concluyendo que no hay una forma o técnica absoluta de tocar la batería, si no que hay que buscar la que te acomode bajo tus propias capacidades y fisionomía.
Cabe destacar que Rodrigo es el único baterista en tocar con 7 pedales en su batería, justificándolos todos, creando y mezclando culturas y ritmos tanto afrocubanos como latinoamericanos.
Vean la galería fotográfica del evento a continuación:
Comentario y fotografías: Paula Cantillana.
Gran nota , saludso…